El pastel de frutas con crema más fácil del mundo
El pastel de frutas relleno de crema y con su cobertura brillante lo encuentras en todas las pastelerías ¡y se ve tan bonito y tan apetitoso! Pero parece tan laborioso de hacer que ni te lo planteas, ¿verdad? Pues cambia el chip, porque este es el pastel de frutas con crema más fácil del mundo! Y además está riquísimo y es una preciosidad.
Esta receta es de las que me gustan a mi, de las que te permiten lucirte con cero esfuerzo, sigue leyendo para conocer los truquitos que te permitirán conseguir un pastel de frutas tan resultón, con su relleno de deliciosa crema y todo! Es un secreto que te cambiará la vida! ;-)
El pastel de frutas con crema más fácil del mundo, ingredientes:
Frutas variadas, en mi caso ciruelas moradas, kiwi, manzana, nectarina y albaricoque.
una lámina de masa de hojaldre
unas natillas compradas
gelatina de manzana
*Si no encuentras gelatina de manzana puedes usar mermelada de albaricoque diluida en agua para pintar y dar brillo, pero entonces tienes que consumir la tarta en pocas horas para evitar que se oxide la fruta y se ponga fea. La gelatina de manzana es un producto profesional, lo que da brillo a los pasteles de fruta de las pastelerías e impide que se oxiden, si usas este producto te pueden durar muchas horas las frutas sin oxidarse, de un día para otro o más!
El pastel de frutas con crema más fácil del mundo, preparación:
Precalentamos el horno a 180º
Desenrollamos la lámina de hojaldre, la colocamos en la bandeja de horno con un papel de hornear debajo (el que viene en el paquete sirve) y la untamos bien con las natillas. Pinchamos toda la superficie con un enedor para que no se levante y la horneamos hasta que esté dorada, unos 15 minutos.
Sacamos el hojaldre del horno y lo dejamos enfriar.
Cortamos la fruta bien limpia y pelada si es necesario en trozos, pensando en la forma que le queremos dar en el pastel. Lo más usual es hacerlo en forma de gajos.
Una vez el hojaldre frío si queremos podemos ponerle mas natillas para que haya más relleno, eso a gusto de cada cual, y empezamos a decorarlo colocando las frutas por encima de las natillas de forma decorativa y alternando los colores.
Calentamos en un cazo pequeño la gelatina de manzana para que se disuelva y pintamos con ella las frutas y todo el pastel por encima, De esta manera nos quedará bien brillante y la fruta no se oxidará.
Si no tenemos gelatina de manzana ponemos en un bol pequeño tres cucharadas de mermelada de albaricoque y dos cucharadas de agua y lo mezclamos bien, bebe quedar como un almibar espeso con el que pintar el pastel, podéis ajustar las proporciones porque no todas las mermeladas son iguales...
Y listo, guardamos nuestro pastel de frutas con crema en la nevera hasta el momento de servir. Una delicia ¡ya lo verás!
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